Avenida Diagonal, junto a Centro Comercial Boulevard Rosa.
La figura de Clara Campoamor es probablemente una de las mas desconocidas y olvidadas de la historia reciente de España. Y ello a pesar de la interesante vida de esta política que tuvo que luchar sola contra izquierdas y derechas en favor del sufragio universal y de la igualdad entre la mujer y el hombre en los convulsos años 30.
Nacida en Madrid en 1888, de joven compagino sus trabajos de profesora y abogada hasta que a finales de los años veinte sus inquietudes sociales le llevan a la política y a militar en Acción Republicana. Posteriormente evoluciona hacia la derecha liberal en el Partido Republicano Radical de Alejandro Lerroux.
Con la proclamación de la República y convertida ya en una de las primeras diputadas de las Cortes, defiende a capa y espada el derecho femenino a tener voto aun teniendo en contra la opinión de sus propios compañeros de partido y de la oposición de izquierdas que pensaba que el voto femenino solo podía beneficiar a la derecha conservadora.
Clara Campoamor no solo era republicana, feminista y liberal, además se consideraba a si misma tan enemiga del fascismo como del comunismo y ante todo muy independiente. Eso la llevo a vivir con verdadero horror los excesos revolucionarios en Madrid durante los primeros meses de Guerra Civil los cuales denuncio en sus escritos y libros . Se marcho exiliada a Suiza y quiso volver a España a principios de los años cincuenta, pero no tuvo el beneplácito de las autoridades franquistas que recordaron su pasado republicano y masón por lo que acabo viviendo y ejerciendo la abogacía en Laussane donde murió ciega con 84 años.
En 1994 el Ayuntamiento de Barcelona le dedico un sencillo pero animado parque con una situación inmejorable en plena Diagonal, a tan solo unos metros de El Corte Ingles y las sedes del Grupo Planeta y La Caixa. En navidad es escenario habitual de varias ferias y mercadillos de artistas y diseñadores amateurs.
En la madrugada del día 2 de Noviembre del 2000, el parque se convertía en triste noticia al estallar un potente coche bomba colocado por la banda terrorista ETA. Aquel atentado que pudo convertirse en tragedia de haber sido activado en hora punta, formo parte de la campaña de terror que ejerció ETA en Catalunya durante el otoño del 2000, y que llevo en unos meses a la muerte del edil del PP de Sant Adria del Bessos, Jose Luis Ruiz Casado y del ex ministro de sanidad, el socialista Ernest Lluch.
... la victoria total, completa, aplastante de un bando sobre el otro, cargará al vencedor con la responsabilidad de todos los errores cometidos y proporcionará al vencido la base de la futura propaganda, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras ...
(Clara Campoamor - La revolución española vista por una republicana, Ediciones Espuela de Plata, 2005, pp. 179)
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